jueves, 26 de agosto de 2010

El colmo de un medio periodístico

A fines de junio del presente año la Policía Metropolitana dependiente de la Municipalidad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires realizó un violento operativo en la zona de Liniers, a los efectos de desalojar locales comerciales presuntamente ilegales, sin habilitación. El jefe de gobierno porteño Mauricio Macri justificó dicho operativo al sostener que "se aplicó la ley" y que los locales "no tenían ninguna habilitación". Quien sabe que solución han encontrado a su subsistencia estos comerciantes precarios.

Tan solo dos meses después se conoció la caducidad de la licencia de Fibertel, puesto que la misma se autodisolvió en el año 2003 al ser absorbida por Cablevisión, del grupo Clarín. Dicha operación nunca fue aprobada por la Secretaría de Comunicaciones de la Nación tal como lo reconociera Clarín en un informe presentado en 2007 ante la Bolsa de Londres. El mismo Mauricio Macri rechazó a Cablevisión en una licitación realizada un año atrás en Buenos Aries, por las mismas razones que el Ejecutivo nacional declaró caduca su licencia.

Las repercusiones mediáticas de aplicar la ley en ambos casos son disímiles, el primero es un tema olvidado que nadie cuestiona, el segundo es presentado por los medios monopólicos como un atentado a la libertad de elección, la Defensoría del Pueblo de la Nación inició una investigación de oficio, legisladores de la oposición presentaron en Diputados un proyecto de ley para dejar sin efecto la resolución, “Es simplemente un escándalo”, se afirma en el penúltimo párrafo de los fundamentos.

¿Por que no se ocupan los legisladores opositores o la Defensoría del Pueblo de la pobre gente que perdió su fuente de ingresos? ¿En el primer caso es correcta la aplicación de la ley y en el segundo no? ¿La licencia es exigible a los comerciantes pobres y los ricos hacen lo que quieren?

Al manipular la información con un fin claramente político, recurriendo a claras tergiversaciones, el grupo Clarín como medio informativo no solamente pierde credibilidad, sino que también se expone a ser investigado por la justicia por sus actuaciones pasadas. ¿Cuál es el colmo de un medio periodístico? Ocultar el acceso a la verdad.

martes, 17 de agosto de 2010

La derecha debe hacerse cargo

Los problemas de seguridad, o “inseguridad”, como les gusta nombrarla a los medios monopólicos, siguen siendo noticias de alto protagonismo, recientemente a raíz de una toma de rehenes, una salidera bancaria y un robo al garaje de una concesionaria de autos premium, tres hechos que ocurrieron en un lapso de 7 horas, algunos protagonizados por menores, todos, por jóvenes.

Esto sucede bajo el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, sin embargo estos jóvenes delincuentes, algunos menores, a que generación pertenecen? Todos fueron niños durante el los gobiernos de Carlos Saúl Menem, sin duda el mayor traidor de quien se tenga cuenta en la historia del peronismo, quien luego de ignorar sus promesas de salariazo y revolución productiva, redujo el gasto público en educación y salud, implementó políticas comerciales liberales, incentivó la inversión extranjera y privatizó empresas públicas. La desregulación, el endeudamiento externo y la protección de la propiedad privada hicieron explotar el desempleo y ayudaron a constituir el gobierno mas conservador de los últimos 30 años, continuador de las políticas neoliberales que con anterioridad habían implementado Videla y Alfonsín.

Los excluidos del neoliberalismo, faltos de educación y de salud, muchos volcados a la droga, son los actuales delincuentes.

Hoy tenemos un gobierno nacional y popular, y mientras reducimos nuestra deuda externa, re-estatizamos las AFJP, Aerolíneas Argentinas y Correo Argentino entre otras empresas estratégicas. Tenemos 2 millones de nuevos jubilados que no tenían aportes y el Plan Argentina Trabaja, de incorporación de trabajadores sin planes clientelísticos. Se redujo la desocupación a un dígito, se redujeron la mortalidad infantil (menos en Capital Federal) y la pobreza. Se prioriza el gasto público en educación y salud, con importantes mejoras en el salario real de docentes y empleados estatales. Se implementó exitosamente la asignación universal por hijo, cuyo impacto inicial fue el aumento en la matriculación de alumnos de escuelas primaria y secundaria y una significativa disminución en los abortos clandestinos.

La nueva generación de argentinos, hoy niños, no será una generación excluida y sin esperanzas, volcada al delito y la droga. Será una generación educada, formada y con las herramientas y la conciencia necesarias para volcarse decididamente al mercado laboral, que tanto necesitan nuestras empresas.

No caben dudas de que el gobierno debe hacer (y está haciendo) un gran esfuerzo para mejorar la seguridad en lo inmediato, así como tampoco caben dudas de que la derecha debe hacerse cargo del fracaso de 25 años de políticas neoliberales, que a unos pocos les dieron grandes beneficios, pero a la mayoría de los argentinos nos condenaron: algunos a la pobreza y a la marginalidad, y a los que no nos fue tan mal, hoy, en cualquier momento, podemos ser víctimas del delito. Muchos de los que hoy reclaman seguridad, son los que ayudaron, con sus políticas neoliberales, a que nuestro querido país llegue a esta triste realidad. Los argentinos hoy estamos ante la oportunidad histórica de vencer a quienes, en la oscuridad, nos gobernaron detrás de Videla, de Alfonsín, Menem y De La Rua. No dejemos que nos sigan engañando.